DESARROLLO DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
A lo largo de nuestros años de experiencia, podemos darnos cuenta que no
solo importa el “conocimiento curricular” que poseamos. Es necesario trabajar
otros aspectos que, sin duda, marcarán la diferencia.
Conflictos familiares, relaciones sociales, expectativas parentales,
problemas de autoestima, autocontrol y un amplio listado de aspectos que tanto
la sociedad como la enseñanza están
dejando de lado. El hecho de no conocer o trabajar la inteligencia emocional,
no significa que no se tenga que poner en práctica. Al no poseer las
herramientas necesarias, no nos queda más remedio que seguir con la estrategia
del ensayo y error, tan característica en nuestro día a día.
Fuente imágenes: Archivo PT