domingo, 12 de marzo de 2017

(1/2) EDUCAR ES LA ESENCIA DE TODO VIATORIANO

“ Educar es la esencia de todo viatoriano”
Apuntes para una historia. Hugo Pizarro Gómez

Cuando el Padre Luis Querbes, pensó en el Santo Patrono para su nueva congregación, lo hizo con absoluta conciencia del momento que vivía la Iglesia en el mundo y fundamentalmente en Francia como consecuencia de la Revolución Francesa y el culto a la razón que había conducido el poderoso Robespierre.

A fines de 1.700 DC el proceso de descristianización había alcanzado en París y en la ciudad de Lyon su punto más álgido con la instalación de tribunales donde el 8 % de los condenados eran sacerdotes.

Las contradicciones de esa sociedad y de la misma iglesia que perseguida y desmotivada no atinaba a buscar caminos de integración y de reencuentro. Esa Iglesia todavía sangrante, con temores silenciosos, con reuniones secretas, con mensajes en códigos fue la mayor preocupación del padre Luis Querbes y su máxima inspiración para buscar en la educación los caminos a una salida de la crisis y las proyecciones de una Iglesia nueva, capaz de volver a cantar en voz alta. Conocedor de la historia de la Iglesia universal, el Padre Querbes, homologó la iglesia de su tiempo con la del siglo lV D.C. época en que vivió el joven Viator, era la Iglesia que amanecía con reminiscencias de las catacumbas , todavía entre luces y tiniebla, todavía entre el ir y venir de los caminos. Viator había sido testigo silencioso y pensante y luego educador y comunicador de esperanza de esa iglesia. Ahora, 13 siglos después era la misma Iglesia a levantar , a rescatar del ruido , a luchar por ser mejores con menos dogmatismo, a entender las crisis como una oportunidad y proyectar de, esa forma, una Iglesia de luz para el futuro.

No se equivoco Ignacio Loyola cuando en 1540 pensó en la educación como única forma de fortalecer la débil figura del Papa amenazada por las reformas de Lutero y Calvino . Disciplinado y muy inquieto intelectualmente Luis Querbes tampoco se equivocaría al pensar en la educación como el medio más ágil, interactuante y eficaz de crecer ahora en la fidelidad a la Iglesia y en la profundidad de la fe, por esos tiempos muy amenazadas y debilitadas, por las transformaciones sociales y por los propios errores.

San Viator , joven lector del siglo lV D.C. sería el patrono de esta nueva congregación. Los datos biográficos de Viator son muy exiguos. Se desarrolló como ayudante del obispo Justo de la ciudad de Lyon, cuya personalidad ocupaba todos los espacios. El obispo Justo era reflexivo y respetado por sus análisis y propuestas teóricas donde, ya en esos tiempos, unía la fe religiosa a los avances de la ciencia. La pasión de Viator por la lectura , su deseo de comunicar lo unieron al obispo quien lo llevó como lector de la Iglesia de Lyon. Ser lector en el siglo lV D.C. era un privilegio de muy pocos y ese saber estaba destinado a familias de elevado poder económico.

No hay precisión del origen social - familiar de Viator. Algunos antecedentes indican que fue apoyado por familia de mayor poder para aprender el arte de la lectura. Su agudeza para, desde joven, resolver problemas cotidianos, su limpia empatía , su sentido solidario lo hicieron visible y digno de ayuda. Su insaciable capacidad lectora unido a el interés que manifestaba por compartir sus conocimiento sin egoísmo, lo hicieron, un avanzado educador para esos tiempos.

Fueron esas razones, más su enorme fidelidad a la iglesia y a su obispo las que motivaron al Padre Querbes para descubrir y proyectar una santidad casi olvidada por el tiempo y por la historia.

Los Clerigos de San Viator en Chile Era un 16 de noviembre de 1957, la primavera de esa tarde en Valparaísos y Viña del Mar matizaba de colores el verde de las laderas y la brisa de la costanera dibujaba cabriolas de saludo y bienvenida. Saturnino San Martin y Cesar Elorrieta llegaban con sotanas negras. Venían con siglos de esperanza a descubrir y fundar humanidad. La educación era su norte. En Chile en la década del 50 el analfabetismo era cercano al 30%. Había mucho que descubrir y fundar. Cada niño sin escuela era una motivación mayor, una esperanza nueva, una sonrisa de libertad para el futuro .

La historia dice que iniciaron su trabajo en el colegio San Antonio de Viña del Mar en 1958. Luego fundaron, en 1962 una Escuela Básica en el “ Fundo La
Laguna” de Curacaví. Pero Chile era un país largo y venturoso con hombres y mujeres solidarias capaz de compartir sus ilusiones y su pobreza. Un país con escasas escuelas y abundantes niños en las calles , un país de catástrofes naturales y de grandes poetas . En 1963 llegarían a Ovalle, la tierra de la insigne e incorruptible Gabriela Mistral, que nació poeta y se hizo educadora por amor a los niños.

En 1964 llegaron al fundo Las Nieves de Puente Alto allí, desarrollan una obra descomunal. El Padre Saturnino San Martin , de baja estatura , de muy elevada autoridad moral , sólido de principio , amplio de criterio , ecuménico de acción con conciencia total de su responsabilidad, sería el encargado de conducir un proyecto enorme “ La escuela Industrial Las Nieves” donde los Clerigos de San Viator se mantuvieron por 27 años. Hoy ese centro educacional sigue siendo un colegio de prestigio nacional, con mucha historia y sobre todo con mucha alegría y nostalgia repartida por Chile y por el mundo.

El Padre Saturnino era capaz de adivinar el trigo en las vertientes. Le gustaba pasear pensante por los largos pasillos de los patios. Una tarde de aquellas me llamó para contarme de su participación en la guerra civil española que se inició en 1936, participó en el frente republicano específicamente en la defensa antiaérea, oculto entre los techos de las casas. No era su opción la guerra, ni el bando donde participaba, pero en una guerra no hay opción. Con los años y por la cercanía de los personajes que participaron en ella yo estudie mas tarde en profundidad esa guerra, por ello, la conversación con el Padre Saturnino volvía siempre a mi memoria como una letanía de nostalgia.

Desde sus inicios participaron también el Padre Miguel Uzabal Salazar, el más chilenizado de los curitas españoles, el Padre Feliciano con una formación más clásica, más escolástica. El Padre José Luis Iturriaga, noble ser humano, disciplinado maestro, amante de la naturaleza, con él aprendimos a valorar la montaña , el aire , al árbol , el agua de vertiente, o sea , la vida.

Luego llegarían una generación de buenos deportistas, específicamente futbolistas, el Padre Antolín , el Padre Esteban (que no jugaba pero sabía mucho de fútbol ), y un extraordinario futbolista de clase profesional, el mejor de todos, el que se bajó del avión y lo llevaron de inmediato a la cancha. Su presentación fue de 12 goles en ese partido. Dos o tres años después se fue a Ovalle, allí en su primer partido hizo otros 14 goles. Un niño como yo no podía entender porque el Padre Ángel Serna se negó a participar en el fútbol profesional chileno. Yo soñaba verlo con la camiseta de la U. Unía a su talento como futbolista un marcado sentido del humor, era también un hacedor de alegría.

Después llegaría una generación de religiosos jóvenes con mayor compromiso social. Ellos se habían levantado temprano y en España comenzaba amanecer. Crecieron con las canciones de Serrat y de Víctor Manuel. El concilio Vaticano ll caminaba y cantaba con la gente por las calles de Europa y de América. Carlos Orduna, Angel Sanchez Casado y Fernado Corona tenían la juventud del olivo , la sencillez del trigo , la claridad del río.

Muchos viatoriano han crecidos en Chile y también por el mundo . La semilla no fue en vano. Algo de todos tenemos en nuestra conducta y mirada. Sin embargo, dos estudiantes chilenos, de Las Nieves, han mantenido una fidelidad total y pura a estos principios, Luis Querbes estaría orgulloso de ellos, Inverlando Troncoso Troncoso y Vicente Hernández Palomino. Los dos educadores y ambos muy plenos y alegres de su historia, fiel a su Iglesia, han hecho de su formación un verdadero apostolado. Si la justicia deja de ser una promesa podrían llevar la medalla al merito Luis Querbes, simplemente para no dejar postergada en la bóveda de la historia una forma de vida de puro educador, o sea, de puro viatoriano.
Talca - Marzo 2017