ELEGIDA POR LA ASAMBLEA GENERAL POR UNANIMIDAD
La religiosa Ana María Sánchez, nueva presidenta de Escuelas Católicas
Ana María
Sánchez nació en Jerez de la Frontera (Cádiz) y es licenciada en Matemáticas,
diplomada en Ciencias Religiosas, posee un máster en Acompañamiento Espiritual
y Discernimiento Vocacional, y es experta en Dirección y Gestión de centros
educativos no universitarios.
Ha sido
directora de varios colegios y de una residencia de protección de menores,
docente, tutora y coordinadora de Pastoral en varios centros, y Directora
General de la Fundación Educativa ACI, además de formadora de postulantes,
maestra de Novicias, Superiora en varias comunidades y delegada de Vida
Consagrada de la diócesis de Ebibeyin (Guinea Ecuatorial). Actualmente es Provincial
de la Congregación en España y Presidenta del Patronato de la Fundación
Educativa ACI.
La Asamblea
anual de ambas instituciones, celebrada de forma telemática, aprobó además la
gestión económica de la institución, la memoria de actividades, el balance de
cuentas, presupuesto para 2021 y el Plan Estratégico de la sede Nacional
2021-22.
Al término de
la Asamblea se ratificó una “Declaración final” que, en líneas generales, pone
de relieve y agradece el esfuerzo colectivo realizado por titulares, equipos
directivos, docentes, alumnos, familias y comunidades religiosas y
parroquiales, durante la pandemia. Destaca la necesidad de aprender de lo
acontecido, priorizar la identidad y afianzar la visión compartida de la
educación donde la innovación pedagógica y pastoral vayan de la mano.
No obstante,
en la Declaración se lamenta que en esta difícil situación que estamos viviendo
se haya aprobado una reforma educativa que ha resultado ser “una nueva
oportunidad perdida para alcanzar el deseado y necesario Pacto Educativo”, con
una norma que limita los derechos de los padres a la hora de elegir centro,
considera a la concertada una red subsidiaria, promueve la desaparición
progresiva de la Educación Especial y excluye la clase de Religión como
asignatura equivalente al resto de materias.
Junto con Más
Plurales, plataforma constituida para defender los derechos
fundamentales y la libertad de enseñanza, Escuelas Católicas se compromete en
esta Declaración a seguir defendiendo, por todas las vías legales y ante todas
las instancias, españolas y europeas, los derechos consagrados en el artículo
27 de nuestra Constitución y a exigir un verdadero Pacto Educativo.
Del mismo
modo, Escuelas Católicas continuará trabajando por la defensa de los derechos
de los centros y sus trabajadores; la transformación digital que permita
experiencias de aprendizaje personalizadas, inclusivas y participativas; la
innovación pedagógica y pastoral y la cultura del cuidado. Para todo ello,
impulsará, creará o reforzará pactos dentro del marco del convenio colectivo
que beneficien al sector; programas como ec-digital, para la certificación de
centros digitalmente competentes; movimientos como “Por la innovación
educativa” o “#profesinnovadores”, en el que ya se han formado más de 15.000
docentes; o herramientas como la nueva Guía que se publicará este curso sobre
protección a menores.
Por último, en
la Declaración se hace un reconocimiento a José Mª Alvira, marianista, por su
compromiso y dedicación durante los últimos ocho años al frente de la
Secretaría General de Escuelas Católicas, y se agradece a Pedro Huerta,
trinitario, y secretario general de la institución desde el 1 de septiembre de
2020, que haya asumido el reto de mantener y potenciar el trabajo desarrollado
por sus predecesores en el cargo.