La Semana del Cine Espiritual nació como una iniciativa de la Iglesia Católica a través de SIGNIS y surge con clara voluntad de comunión y colaboración con distintas instancias del mundo cinematográfico y educativo.
Encontraréis más información sobre la Semana de Cine Espiritual, en el siguiente enlace: http://www.pastoraldejuventud.es/semanadecineespiritual/
La fecha de la semana de cine espiritual. Será durante los días 10, 11, 12, 13 y 14 de febrero de 2020.
Las películas que se proyectarán son las siguientes:
Lunes, 10 ‐ La canción de mi padre (2018) Andrew Erwin, Jon Erwin. 110 min. Temas: música cristiana, maltrato en la familia, la fe, la redención, el perdón. Destinatarios: 3º y 4º ESO – Bachillerato y Ciclos.
Martes, 11 ‐ La revolución silenciosa (2018) Lars Kraume. 111 Min. Temas: Totalitarismo, lucha por libertad, sentido religioso, compañerismo, esperanza. Destinatarios: 3º y 4º ESO – Bachillerato y Ciclos.
Miércoles, 12 ‐ El vendedor de sueños (2016) Jayme Monjardim. 98 min. Temas: sentido de la vida, inteligencia emocional, amistad, deshumanización, sabiduría, trascendencia. Destinatarios: ESO.
Jueves, 13 ‐ Una cuestión de género (2018) Mimi Leder.120 min. Temas: Igualdad, matrimonio, encuentro padres‐hijos, vocación, fortaleza, derechos humanos. Destinatarios: 3º y 4º de la ESO – Bachillerato y Ciclos.
Viernes 14 ‐ ¡A ganar! (2018) Sean McNamara. 100 min. Temas: Deporte, duelo, espíritu de superación, fuerza en Dios, trabajo en equipo. Destinatarios: 5º y 6º de Primaria y toda la ESO.
La Exhortación apostólica post-sinodal del papa Francisco dedicada a los jóvenes Christus
Vivit es un gran acontecimiento para la pastoral con jóvenes que queremos resaltar en esta
edición. La forma es una carta personal que marca un estilo lleno de proximidad, ternura
y simpatía. El fondo resalta a un Cristo contemporáneo, compañero de los jóvenes.
El papa sugiere que hay que afrontar los nuevos lenguajes del mundo digital conectando lo
virtual y lo real proponiendo “testimoniar la belleza de la generosidad, del servicio, de la
pureza, de la fortaleza, del perdón, de la fidelidad a la propia vocación, de la oración, de la
lucha por la justicia y el bien común, del amor a los pobres, de la amistad social” (Ch.V. 36).
La cultura audiovisual y en concreto el cine puede contribuir a una “pastoral popular
juvenil” es decir, “una pastoral más amplia y flexible que estimule, en los distintos lugares
donde se mueven los jóvenes reales” (Ch.V., 230). La Semana del Cine Espiritual se ha
mostrado “capaz de crear espacios inclusivos, donde haya lugar para todo tipo de jóvenes
y donde se manifieste realmente que somos una Iglesia de puertas abiertas” (Ch.V., 234).
Así las variadas narraciones de las películas permiten un contraste que “ofrezca espacio a
todos y a cada uno con sus dudas, sus traumas, sus problemas y su búsqueda de identidad,
sus errores, su historia, sus experiencias del pecado y todas sus dificultades” (Ch. V., 234).
El lema de este año es:
¡VIVE! En tierra extraña
Esta metáfora de actualidad hace referencia a la emigración. Todos somos emigrantes
hacia otra tierra y vivimos nuestra vida en salida, en vocación misionera. “Porque nuestra
vida en la tierra alcanza su plenitud cuando se convierte en ofrenda” (Ch. V. 254). “Yo soy
una misión en esta tierra y por eso estoy en el mundo. Esa es la razón por la que estoy aquí
en este mundo” (Ch V. 254 citando E.G. 273).
La metáfora de la salida puede destacar en el cine el proceso de transformación, la
provisionalidad, la mirada esperanzada, la construcción de la vocación, el empeño del
servicio.