Escucha tu interior.
Allí resuenan las preguntas sobre tu vida y sobre tu futuro,
allí se encuentra la brújula que guiará tus pasos, el motor que impulsará tu existencia.
La respuesta a esas preguntas es tu propia vocación, y solo desarrollándola, siguiéndola, haciéndola crecer, darás cumplida respuesta a tus inquietudes.