Buenos días.
Desconecta de la prisa cuando esta no es necesaria.
Si te molesta que la gente no camine deprisa, que el compañero no trabaje deprisa, que no te sirvan, ni atiendan deprisa, si el coche de delante no va deprisa, el cura no dice misa deprisa...; algo está fallando en ti.
Revisa tu reloj interior y relaja tu tempo. Disfrutarás más de todo lo que te rodea.
Imagen: http://desmotivaciones.es